Tomás González Vallejo empezó a trabajar en Iberia a la edad de 15 años mientras estudiaba para ser profesor mercantil. Tuvo varios puestos de responsabilidad, tanto en Nueva York, en el que fue vicepresidente de tráfico y ventas de la compañía, como en Madrid y Bruselas donde fue delegado de Iberia. Durante su época de trabajo en la aerolínea AVIACO como director comercial, fue uno de los grandes impulsores de los vuelos charter en España.
Durante el tiempo que estuvo como delegado en Madrid también fue nombrado presidente de ALA (Asociación de Líneas Aéreas) y trabajó de forma muy cercana con los presidentes y directores generales de las principales agencias de viaje y touroperadores españoles.
Iberia confió en su labor cuando España entró en la Comunidad Económica Europea y le encomendó el desarrollo de las líneas desde España a Bélgica y Luxemburgo enviándole como delegado de Iberia a Bruselas.
Sus grandes pasiones fueron el deporte, en especial el atletismo, el tenis y la natación; el turismo a través de la aviación pero sin perder de vista a todos los actores que intervenían en el mismo y finalmente su familia, su mujer, padres, hermanos, sobrinos, hijos y nietos, siempre estuvo cerca de todos ellos apoyandoles en todo lo necesario.
Su pasión por el turismo tuvo su fruto y sus 4 hijos, su yerno y dos de sus nietos se dedican al turismo. Tomás González Hernando trabaja en Presstour Viajes, su hijo Víctor trabaja en Airbus, su hijo Carlos trabaja en Europamundo Vacaciones, su hija Paloma en Viajes Azul Marino, su yerno Joseba Urquiola trabaja en Club Marco Polo y sus nietos Víctor González Luengos y Andrea González Sabugo trabajan en Airbus y Europamundo respectivamente.
Tomás González tuvo la oportunidad de dar varias veces la vuelta al mundo y supo trasmitir tanto a su equipo de trabajo como a su familia la importancia de conocer otras culturas y otros países para llegar a ser ciudadanos del mundo.
