La aerolínea valenciana Air Nostrum ha comunicado este sábado a la plantilla que deja de volar temporalmente y hasta nuevo aviso debido a las restricciones a la movilidad nacional e internacional y al cierre de fronteras ocasionados por el coronavirus.
El presidente de Air Nostrum, Carlos Bertomeu, ha informado a sus trabajadores de que a las siete de esta tarde ha despegado el último vuelo operado por la compañía, que en los últimos 25 años ha funcionado de forma ininterrumpida y ha operado más de dos millones de vuelos y ha transportado a más de 90.500 pasajeros.
Bertomeu ha señalado que la suspensión del cien por cien de los vuelos operados por Air Nostrum se hace por fuerza mayor y ha explicado a la plantilla que se va a intentar parar en la medida de lo posible la salida de tesorería, lo que conllevará entre otras medidas un expediente de regulación de empleo (ERTE) para los más relacionados con la parada de la actividad.
Air Nostrum asegura que va a trabajar también para acceder a las medidas anunciadas que le permitan generar liquidez adicional, como las iniciativas puestas en marcha por el ICO y otras entidades de crédito, y para asegurar que la vuelta a la actividad se pueda hacer en las mejores condiciones.
ERTE de tres meses para el 100% de la plantilla
El pasado día 20 de marzo, Air Nostrum presentó un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) por fuerza mayor para el 100% de la plantilla, que en estos momentos es de 1.439 empleados.
La compañía adopta esta decisión para hacer frente a la pandemia del COVID-19, asegurar la supervivencia de la empresa y preservar el empleo a medio y largo plazo.
El ERTE se ha solicitado con una duración de tres meses, pero la compañía monitoriza permanentemente la evolución de la crisis sanitaria y sus efectos sobre la movilidad de los ciudadanos para evaluar si sería posible acortar los plazos y recuperar la actividad anticipadamente o si, por el contrario, fuese necesario ampliar el periodo de la regulación temporal de empleo.
La aplicación del ERTE va a estar vinculada a la carga de trabajo prevista en cada área, tal y como exige la ley. De tal forma que los diferentes colectivos de la plantilla de Air Nostrum se van a ver afectados de forma proporcional a la reducción de actividad de sus áreas laborales; los vinculados con el vuelo van a quedar prácticamente sin actividad, en su mayor parte, mientras que el área técnica va a continuar con carga laboral porque la parada masiva de aeronaves se aprovechará para adelantar trabajos que permitan volver a operar con la máxima eficiencia cuando se reanuden los vuelos.
Así, las plantillas de los colectivos de vuelo, pilotos y tripulantes de cabina de pasajeros estarán afectadas por el ERTE hasta unos máximos de 90/100%.
En el área técnica, los técnicos de mantenimiento de aeronaves se verán afectados en función de las bases, en un umbral de entre un 50 y un 100% por el motivo antes citado.
El presidente y los miembros que componen la dirección de la empresa se ven afectados por el ERTE en un 75%, lo que no impedirá que sigan liderando la compañía con total y absoluta disponibilidad.
Para el resto de personal de oficinas y servicios centrales la afectación por el ERTE será de media superior al 50%.
Este ajuste laboral forma parte de una batería de medidas de ahorro de costes adoptada por Air Nostrum para hacer frente a esta crisis inédita en la historia de la aviación comercial mundial.
La compañía ha parado todas las contrataciones externas, dejado en suspenso la formación corporativa y cancelado gastos discrecionales, entre otras decisiones para preservar la tesorería.