Los principales consolidadores creen posible salvar la temporada, «al menos en parte»

  • Aunque se muestran cautos, se resisten a dar por perdido el año, consideran que ya se comienzan a ver movimientos y que en otoño, si todo marcha bien en el plano sanitario, podría afianzarse la recuperación; piensan, no obstante, que es una “quimera” alcanzar las cifras de 2019
  • Son más pesimistas, en cambio, a la hora de hablar de la reactivación de su propia actividad, pues depende mucho del largo recorrido, apartado que –según coinciden– será el último en activarse, tras el ámbito doméstico o el contexto europeo.
  • Los españoles –dicen– tienen ya muchas ganas de viajar, aunque persiste la incertidumbre sobre cómo y donde viajar, pues los men-sajes son todavía muy difusos.
  • Se ha subrayado que la cultura viajera de los españoles es una “inmensa oportunidad de negocio” para los agentes de viajes, que no han de ser meros distribuidores sino auténticos asesores de viajes

Representantes de los principales consolidadores del mercado nacional han participado hoy en una nueva sesión de ‘El ZOOM de ObservaTUR’, el foro de debate digital creado por el Observatorio nacional del Turismo Emisor para tratar de reflexionar acerca del turismo post COVID-19, en un tiempo marcado por el confinamiento de los ciudadanos en prácticamente todo el planeta, la hibernación (en el mejor de los casos) de la economía mundial y el estado de alarma generalizado en todo el mundo.

En concreto, han intervenido en este foro José Oliver, director general de Aerticket; Rubén Fernández, director general de Cógelo al Vuelo; Santos García, director general de Nego Fly; y Jorge Zamora, director general de Servivuelo. El debate, desarrollado a través de la plataforma digital ZOOM, ha sido moderado por Marcos Franco, socio-fundador de ObservaTUR.

En sus intervenciones, los representantes de estas compañías se han mostrado cautos, si bien creen que todavía es posible salvar la temporada turística al menos en parte y se resisten a dar por perdido el año 2020, que será malo, “pero que hemos de poner todos los medios para que no sea catastrófico”, según Fernández, quien también opina que salvar este ejercicio a niveles de 2019 es “poco probable”, cuando no –señala– una “quimera”.

Aunque todos los representantes ya han comenzado a ver movimientos (“algo que es ya una inyección de ánimo”, en palabras de Zamora), piensan que hasta otoño no comenzaría la verdadera consolidación o invierno, siempre que todo marche bien en el plano sanitario. “Todavía es posible salvar un 30-40% de la temporada turística”, considera José Oliver, quien también apunta que la situación actual podrá favorecer la desestacionali-zación del turismo en mayor medida.

Para el representante de Nego, Santos García, el primer hecho importante de la recuperación se producirá “cuando las primeras operaciones y los primeros viajeros se vayan y vuelvan con total normalidad”, algo que no ocurrirá, a juicio de García, hasta el mes de julio. Y aunque este hecho generará mucha confianza, el portavoz de Nego, en todo caso, estima que la recuperación será “lenta”. Primero, el mercado nacional, asegura. Lue-go, los ‘pasillos’ europeos y, en última instancia, el largo recorrido.

Pesimismo en la propia actividad

Los representantes de los principales consolidadores del mercado nacional, en cambio, son más pesimistas a la hora de hablar de la reactivación de su propia actividad, pues depende mucho del largo recorrido, apartado que –según coinciden– será el último en activarse, tras el ámbito doméstico o el contexto europeo. “Si llegamos a un 30 por ciento será un éxito”, considera Santos García. “Probablemente el receptivo y los hoteles puedan salvar la temporada”, ha destacado el director general de Servivuelo, “pero el negocio aéreo es más complejo, porque depende de terceros países y del producto que haya”.

Entienden igualmente que el papel de las agencias en esta crisis ha resul-tado fortalecido. “El ‘expertise’ de los profesionales de las agencias cada vez tendrá más valor a medida que se nuble el horizonte”, ha indicado director general de Aerticket. “Las agencias salen reforzadas de esta crisis”, ha subrayado Zamora. “Las agencias tiene a partir de ahora una oportunidad de oro para prestigiar más si cabe su trabajo”, ha manifesta-do Rubén Fernández. “La cultura viajera de los españoles es una inmensa oportunidad de negocio para los agentes de viajes, que no han de ser me-ros distribuidores sino auténticos asesores de viajes”, ha concluido Santos García.

También se ha dicho en el foro digital de ObservaTUR que los españoles tienen ya muchas ganas de viajar, aunque persiste la incertidumbre sobre cómo y donde viajar, pues los mensajes son todavía muy difusos.
Los ponentes, por último, han destacado el valor de la tecnología, tanto en el pasado más reciente (“se ha demostrado que estamos muy avanzados”, según García) como de cara al futuro, aunque la crisis ha demostrado, han dicho, que “la tecnología sin las personas no vale de nada”, ha expli-cado el portavoz de Cógelo al Vuelo. Y lo han ejemplificado con el tema de los retornos, las repatriaciones y las devoluciones.

Llegado este punto, Jorge Zamora ha realzado el trabajo que han llevado a cabo las asociaciones de agencias, cuyo trabajo en este periodo ha resultado determinante, asunto en el que igualmente ha incidido el director general de Nego Fly; “Es preciso elevar el asociacionismo, que nos aso-ciemos para reivindicar en mayor medida nuestro derechos”.

Tangencialmente se ha hablado del NDC como recurso tecnológico de fu-turo, porque merecería otro debate aparte, aunque se ha coincidido en que todavía tiene que “despegar” en mayor medida.

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