Desgraciadamente, todos estos esfuerzos que han demostrado los empresarios del sector, no son ya suficientes para mantener el equilibrio patrimonial de los balances y precisamos desde ya, que se tomen medidas contundentes que nos ayuden a aguantar durante los próximos meses que se presentan todavía muy difíciles a raíz de los malos datos sanitarios que nos siguen amenazando.
Se han cumplido ya seis meses desde que la evolución del Covid irrumpiera en nuestras vidas de una forma tan agresiva y cambiara de un plumazo nuestros hábitos y negocios, han sido seis largos meses en los que desgraciadamente sólo hemos visto empeorar la situación sin tener todavía ningún horizonte de esperanza.
En todo este largo periodo las agencias de viajes hemos hecho un esfuerzo sin precedentes para poder gestionar nuestros negocios, sin contar con prácticamente ningún ingreso y haciendo frente a la doble presión de mantener nuestros compromisos con nuestros equipos y nuestros gastos generales, mientras tratamos de responder también ante nuestros clientes, a pesar de la impostura de muchos de nuestros proveedores que no han sabido estar a la altura y no han hecho frente a sus obligaciones y compromisos.
Esta doble presión, está poniendo a nuestras empresas en una situación muy delicada y nos esta obligando a tener que agotar nuestros limitados recursos ,en algunos casos , y a tener que elevar el endeudamiento de las empresas en otros, y todo ello con el firme propósito de mantener nuestra estructura empresarial y los equipos que nos han hecho crecer hasta que toda esta pesadilla termine.
Desgraciadamente, todos estos esfuerzos que han demostrado los empresarios del sector, no son ya suficientes para mantener el equilibrio patrimonial de los balances y precisamos desde ya, que se tomen medidas contundentes que nos ayuden a aguantar durante los próximos meses que se presentan todavía muy difíciles a raíz de los malos datos sanitarios que nos siguen amenazando.
Tanto desde Europa, como el Estado, las comunidades autónomas y los ayuntamientos, tienen ya que tendernos una mano de forma decidida para que podamos mantener nuestros negocios, e insisto que deben hacerlo ya porque se nos han agotado los recursos y tienen esa responsabilidad y la certeza de que cada euro que inviertan ahora en salvar nuestra industria revertirá en las arcas de estado con creces como siempre hemos hecho y cómo volveremos a hacerlo tan pronto como remita la crisis sanitaria.
Son muchas las cosas que se pueden hacer desde las distintas administraciones y que no pueden ya demorarse, como la prolongación de los ERTE y las ayudas a los numerosísimos autónomos que hay en nuestro sector, hay que flexibilizar las condiciones laborales porque desgraciadamente nuestros negocios no pueden soportar unos costes elevados con unas previsiones tan bajas de actividad durante los próximos meses, hay que plantear dar ayudas directas a un sector que está haciendo frente a una “catástrofe”, se pueden hacer planes de incentivo como los que ha hecho la comunidad de Andalucia y otros países competidores como Italia, hay que rebajar la fiscalidad a unos negocios ahogados y hay otras muchas cosas que estamos repitiendo desde que se inició esta crisis pero desgraciadamente no están siendo atendidas.
El impacto económico de esta situación será proporcional a la duración de la enfermedad y las actuaciones que las administraciones lleven a cabo de forma urgente para ayudar a un sector que está en peligro y que es indispensable para la recuperación de turismo por su papel en la planificación, gestión y distribución de viajes.
Las agencias de viajes hemos demostrado ya muchas veces nuestra capacidad de lucha, de reinventarnos y de salir de situaciones extremas gracias a la gran capacidad de sus empresarios y trabajadores. Somos el canal más seguro y fiable para reservar los viajes y aportamos un valor imprescindible en la cadena de producción y vamos a ser capaces también de salir adelante de esta crisis sin precedentes.