Entrevista a Adolfo Utor, presidente de la naviera Baleària.
El proyecto de Baleària para la nueva terminal de pasajeros del Puerto de València será un referente en innovación y sostenibilidad al garantizar la autosuficiencia energética 100% con energías renovables. Además, reforzará la integración del puerto con la ciudad. El proyecto elaborado por Baleària contempla unos tráficos anuales de 370.000 pasajeros en los primeros cinco años de explotación (que arrancará en 2023), que se situará alrededor del medio millón en los años siguientes, con un crecimiento anual pautado del 2%, según la estimación de la naviera.
Adolfo Utor, presidente de Baleària, destaca en esta entrevista que «la terminal de pasajeros supone un hito para Baleària y es uno de los proyectos de los que nos sentimos más orgullosos y que tendrá corazón verde, espíritu inteligente y será un faro de sostenibilidad en el Puerto de València».
Utor también ha compartido con Gaceta del Turismo su visión sobre el impacto en la actividad económica resultado de la actual pandemia de coronavirus.
¿Qué impacto ha tenido hasta ahora el covid en el volumen de negocio de Baleària? ¿Cómo afrontan la salida de esta crisis y la recuperación de la actividad?
El impacto desde marzo del año pasado ha sido significativo. Es complicado hacer una valoración económica porque Baleària se dedica a un combinado de transporte de mercancías rodadas, a través de camiones que llegan a las islas, al norte de África y también en el Caribe y, de pasajeros. Las restricciones que ha habido a la movilidad de las personas nos han afectado de manera contundente, claro; pero no tan de lleno, por ejemplo, como a las compañías aéreas, que tienen una parte muy importante de pasajeros, ni tanto como a la actividad turística hotelera, pero bastante más fuerte que a otras actividades de mercancías puras, como buques o camiones que transportan solo mercancías o a la distribución en las grandes empresas del sector agroalimentario que se han visto poco afectadas y, en algunos casos, esta crisis incluso ha impulsado sus actividades.
En nuestro caso ha sido una combinación. Nos ha afectado, evidentemente, hemos cerrado el año con pérdidas, pero, afortunadamente, llegamos en buenas condiciones a esta crisis. Las ayudas que ha promovido el Gobierno a través de los créditos ICO nos hacen ver el horizonte con bastante tranquilidad desde el punto de vista de la liquidez y deseamos que las soluciones sanitarias, especialmente la vacuna, nos ayuden a abordar un año 2021 en mejores condiciones.
¿Para cuándo prevé la recuperación, sino a niveles pre-covid, sí un repunte de la actividad?
Es muy difícil hacer predicciones, porque las hicimos al principio de la pandemia y hemos errado en todas. La segunda ola ha sido un preámbulo de la tercera y la vacuna, aunque hay momentos de euforia, no sabemos con qué rapidez se va a suministrar. No hay una seguridad, por lo que nosotros, como compañía, tenemos que prepararnos para lo peor.
Esperamos que este verano sea bueno y hayamos superado los obstáculos actuales, no va a ser como el verano de 2019, ni mucho menos, pero esperamos que sea mejor que el de 2020, en el que, por otra parte, sí tuvimos actividad en las líneas con Baleares, que funcionaron bastante bien. Confiamos en que este verano, con el covid todavía presente, porque el covid va a seguir presente y vamos a tener que convivir con ello, adaptándonos a esta nueva realidad distinta, empecemos a tener una cierta actividad. Desde luego, la Semana Santa la vemos todavía muy complicada desde el punto de vista de la movilidad de las personas, pero hay que tener confianza y ser optimistas, aunque no va a ser fácil. No es un camino sencillo el que tenemos por delante.
¿Han estado las administraciones, todas, las autonómicas, la nacional, la europea, a la altura de las circunstancias en cuanto a las ayudas económicas articuladas para ayudar al tejido empresarial y social que se ha visto tan afectado por esta situación?
Es un tema complicado, pero creo que con el sistema que tenemos el Gobierno proporcionando liquidez a las empresas con los créditos ICO ha hecho una buena gestión. En estos momentos, tenemos a casi toda la economía, a muchas pequeñas y medianas empresas, pero también a algunas grandes, aguantando gracias a estos créditos, que luego hay que devolver, no lo olvidemos.
Y los ERTE también han sido un instrumento muy útil. Ahora vendrán los fondos europeos de recuperación, bautizados como Next Generation que, sin duda, suponen un hito sin precedentes, espero que pronto empiecen a dinamizar la economía porque es muy necesario.
¿Hay que ir más allá con las ayudas? pues dependerá de cómo vaya discurriendo la situación, pero, por ahora creo que se han hecho las cosas relativamente bien para mantener el tejido productivo; y asumo que mi empresa en esta crisis va a perder, por supuesto, ya lo ha hecho, ha perdido en este año más del 50% de su valor; pero todavía tiene valor y capacidad de seguir trabajando y remontar esta situación. Desde Baleària nos sentimos atendidos, no podemos pretender recibir ayudas mientras estemos en condiciones de trabajar. Pero imagino que habrá muchas empresas que estén en peor situación y entiendo que reclamen más ayudas.
Confiemos en que las empresas puedan recuperarse y volver a trabajar con normalidad. Nosotros en ello estamos, trabajando mucho para recuperarnos de esta crisis económica y financiera tan relevante; e intentar salir de esto de la mejor forma posible, y en la medida de nuestras posibilidades ayudando en lo que podamos al desarrollo de nuestro país.
¿Qué novedades nos puede contar de la nueva terminal de cruceros con la que contará el Puerto de València proyectada por Baleària?
Uno de los proyectos de los que nos sentimos más orgullosos como empresa es precisamente esta nueva terminal de pasajeros del Puerto de València. Se trata de una estación marítima para pasajeros de línea regular, los que habitualmente van a las islas Baleares desde el Puerto de València; también para pasajeros de líneas internacionales como la que nosotros mismos explotamos con Argelia, y para pasajeros de cruceros, una actividad que ahora sabemos que está afectada como consecuencia del covid, pero que también confío que se vaya recuperando a partir del próximo verano.
Desde que se publicó el proyecto teníamos muy claro el concepto de estación marítima que queríamos, con una apuesta clara, como ha hecho Baleària en todo, por la sostenibilidad y por la autosuficiencia energética, y que cuenta con proyectos interesantísimos como la planta Hidro Genera, que se generará con un campo fotovoltaico que estará sobre los techos de las naves que recuperamos. El proyecto garantiza que el 100% de la energía eléctrica necesaria se producirá en las propias instalaciones y será de origen renovable: fotovoltaica, eólica, hidrógeno renovable o biocombustible.
Esta nueva terminal de cruceros contempla también un proyecto de recuperación de patrimonio histórico del Puerto de València, con las naves de los antiguos astilleros de la Unión Naval de Levante. También contaremos con la planta de biometano para reciclar todos los residuos que genere la misma estación marítima, y es una estación marítima que contará también con suministro de GNL para los buques, que además también tiene previsto establecer un espacio de desarrollo económico y generación de empleo: una escuela de innovación, tratando también de integrarla plenamente con la ciudad de València y con el barrio de Natzaret, queremos que sea una terminal integrada con la ciudad y que corresponda a las necesidades de atención que tiene la ciudad con aquellos pasajeros que salen y entran por el Puerto de València. Es un objetivo muy ilusionante y muy ambicioso desde el punto de vista medioambiental y empresarial.
Este proyecto supone un hito para Baleària; un espacio moderno, alineado con nuestra política ecoeficiente, que tendrá corazón verde, espíritu inteligente y será un faro de sostenibilidad en el puerto de València. Hemos apostado por una infraestructura pensada para las personas, y comprometida con los pasajeros y la ciudad.