El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, han suscrito este miércoles el convenio que supone la puesta en marcha del tan demandado ‘Plan Agiliza’, que prevé reducir un 30% los trámites administrativos para desburocartizar la administración, atraer la inversión y facilitar las iniciativas que generen empleo.
El plan, que había sido anunciado por el jefe del Consell a finales de 2018, arranca ahora su andadura coincidiendo con el inicio del proceso de reconstrucción de la Comunitat Valenciana tras la pandemia de la Covid-19.
A la firma del documento han acudido la consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo; el conseller de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent; la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollà, y el conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España.
Como ‘hoja de ruta’, el plan pretende eliminar 350 de 1.200 trámites mediante la eliminación de duplicidades como la solicitud de la misma documentación por parte de diferentes consellerias. También busca reducir un tercio la media de 197 días de espera para los procedimientos.
Además, se creará la plataforma ‘GUIA-T’ con un asistente virtual para el seguimiento de los expedientes. También servirá para atender y solucionar las dudas que puedan surgir a lo largo del trámite gracias a la ayuda de un asistente virtual que estará disponible los 365 días del año.
Además, se van a elaborar proyectos específicos para sectores estratégicos: ‘Plan Agiliza Industria’, ‘Plan Agiliza Urbanismo’ y ‘Plan Agiliza Medio Ambiente’, ámbitos donde según ha apuntado Puig se encuentran «los principales cuellos de botella en este momento».
En concreto, el ‘Plan Agiliza Industria’ se pondrá en funcionamiento a finales de 2020 con un presupuesto de medio de millón de euros. El ‘Plan Agiliza Urbanismo’ estará disponible en 2021, dotado con un millón de euros, y el ‘Plan Agiliza Medio Ambiente’ estará operativo a lo largo de 2021.
El ‘president’ Puig ha señalado que en el proceso de reconstrucción de la Comunitat Valenciana «la Administración debe facilitar al máximo la inversión y todas las iniciativas que generen empleo».
«Sabemos que durante los próximos meses y años vamos a tener grandes dificultades en la actividad económica y por eso la Administración tiene que trabajar intensamente para mejorar la agilización y desburocratización», ha insistido.
El máximo responsable del ejecutivo valenciano ha incidido en la importancia de profundizar en la «cooperación» y en la «cogestión» entre el empresariado y los distintos departamentos del Gobierno autonómico para «generar un clima de confianza» y de ofrecer facilidades que permitan convertir a la Comunitat en un «gran destino de inversión».
En este sentido, el president ha destacado la posibilidad que se ofrece al empresariado a través del convenio firmado, de «estar presentes en la evaluación de los procesos administrativos».
Desde la patronal autonómica, el presidente de la CEV, Salvador Navarro, ha recordado que este es «un convenio ampliamente demandado» y ha valorado «la voluntad» de la Administración por ser «ágil, eficiente y poco burocratizada».
Según Navarro, sobre todo en estos tiempos, se requiere «una administración que sea ágil, que sea eficiente y sobre todo que dé credibilidad a la ciudadanía» y ha valorado la firma del convenio como un paso «importante» en este sentido.
El Plan Agiliza, impulsado por la Conselleria de Justicia, Interior y Administración Pública, resurge en un momento en que, a causa de la pandemia de COVID-19, la actividad económica ha sufrido una notable contracción, especialmente entre las pymes, que concentran el 90% del empleo en la Comunitat, y que puede derivar en una caída del PIB autonómico de alrededor del 8%, según estimaciones del Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas (IVIE).
Actualmente, en la Comunitat Valenciana operan más de 350.000 empresas, de las que el 80% pertenecen al sector Servicios, el 12% a la Construcción y el 8% a la Industria. Antes de la crisis de la COVID-19 el sector industrial crecía casi 5 puntos por encima de la media nacional y el de la construcción lo hacía un 4,4 por ciento.