- Los hoteles de la ciudad de València estudian emprender acciones legales para reclamar los impuestos y tasas pagados correspondientes al periodo de inactividad.
- El IBI también ha aumentado un 12,51% en 2020.
- Cerca de un 40% de los hoteles de la ciudad de València siguen cerrados.
Mientras la industria hotelera atraviesa una de las situaciones más críticas de su historia debido a la crisis sanitaria, la insensibilidad y el desprecio a esta industria se hace patente en la ciudad de València, cuyos hoteles han comprobado cómo el equipo que gobierna el ayuntamiento de la ciudad no solo no ha revisado o reducido las tasas e impuestos municipales, y tampoco ha contemplado ninguna compensación o bonificación, sino que ha procedido a incrementar los principales tributos durante este 2020.
Tras varias reuniones infructuosas con representantes del consistorio, algunos de los establecimientos de HOSBECValencia han iniciado acciones legales para reclamar los impuestos y tasas pagados durante un periodo en el que han estado completamente sin actividad.
El resto de empresas están estudiando iniciar este tipo de reclamaciones ante la sorpresa de recibir liquidaciones de impuestos con un coste un 20% superior al del pasado año. Impuestos como el IBI se ha incrementado en un 12,51% en 2020, suponiendo para un establecimiento medio un gasto de 149.132,21 euros, frente a los 131.940,07 euros de 2019, denuncian los hoteles.
El Impuesto de Actividades Económicas (IAE), por su parte, ha subido más de un 20%. Todo ello en un año que puede calificarse como el peor de la historia para la hotelería valenciana, en el que la continuidad y viabilidad de muchos de los establecimientos pende de un hilo. Como dato de referencia, además del cierre total durante el periodo de confinamiento, a fecha 17 de noviembre había únicamente un 62,3% de las plazas abiertas en València, con cerca de un 40% de los hoteles de la ciudad cerrados, según datos de Turisme Comunitat Valenciana.
Mientras otros subsectores del turismo sí han recibido algunas ayudas, el sector hotelero no ha encontrado ningún apoyo por parte del Ayuntamiento, cuando en otras ciudades españolas se han aplicado reducciones de impuestos o bonificaciones. Por ejemplo, en Alicante y Sevilla se aplicó la exoneración de la tasa de basuras durante el segundo trimestre, con un impacto económico estimado de 1,5 millones de euros en el caso de los hoteles sevillanos, señalan desde Hosbec.
Además, Alicante amplió la posibilidad de fraccionamiento del IBI y de la Tasa de Basuras en mensualidades hasta febrero de 2021 y ha mantenido la rebaja del 5 por ciento del IBI aprobada en las cuentas de 2019. El Ayuntamiento de Benidorm, por su parte, ha anunciado una bonificación del 25% en la tasa de basuras y estudia también rebajar otros impuestos y tasas para permitir la supervivencia de sus empresas.
En Córdoba se condonó la tasa de basuras durante los meses de mayo y junio, y en Madrid se aplicó una reducción del 25% en el IBI y el IAE durante el Estado de Alarma. Granada aprobó la exoneración de la tasa de basura y terrazas durante el Estado de Alarma, con un impacto económico de 1.600.000 euros.
En la localidad mallorquina de Calvià, se redujo la tasa de basuras en un 50%, y se aprobó el aplazamiento del pago del Impuesto de Bienes Inmuebles del sector productivo hasta un 50%. En Canarias, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria también ha decidido exonerar a empresarios y ciudadanos de ocho tasas sobre la actividad económica, así como retrasar hasta diciembre el pago del IBI, el Impuesto de Vehículos, Vados y Actividades Económicas (IAE).
«Todos estos ejemplos muestran que el apoyo de los ayuntamientos puede encontrar diversas fórmulas siempre que haya una voluntad manifiesta, que la planta hotelera de Valencia no ha encontrado por el momento», denuncian los hoteleros valencianos.
«Ante las repetidas solicitudes, solo ha recibido silencio por parte de la Administración y la aplicación férrea de un aumento impositivo aprobado con unas condiciones radicalmente diferentes a las actuales, lo que evidencia una total falta de sensibilidad ante esta dura situación», añaden.
Aquellos ayuntamientos que aleguen ‘imposibilidad legal’ para poner en marcha este tipo de medidas lo hacen a sabiendas de que la Ley de Haciendas Locales en su artículo 74.2 permite que «los ayuntamientos mediante ordenanza podrán regular una bonificación de hasta el 95% de la cuota íntegra del IBI a favor de inmuebles en que se desarrollen actividades económicas que sean declaradas de especial interés o utilidad municipal por concurrir circunstancias sociales, culturales, histórico artísticas o de fomento del empleo que justifiquen tal declaración”.
«Desde HOSBEC no imaginamos una circunstancia más excepcional que la actual pandemia y crisis sanitaria que golpea al turismo como causa para justificar esta bonificación», concluyen.