El pasado domingo falleció a los 84 años Rufino Calero, reconocido en la industria hotelera por ser el fundador y presidente de la cadena Vincci Hoteles, que gestiona 36 establecimientos en España, Portugal y Túnez.
Nacido en 1935, Calero dedicó casi 70 años a la industria hotelera. Empezó su carrera profesional en 1953 en Husa Hoteles y permaneció en la cadena hasta 1958, año en el que pasó a ser director Administrativo de la cadena Hispanhotel. En 1961 adquirió su primer hotel en propiedad, el Hotel Gran Vía en Zaragoza. Desde 1965 a 1969 dirigió el Hotel Edelweis de Candanchú (Huesca).
La hostelería es una profesión vocacional y cuando uno tiene el ‘veneno’ en el cuerpo es difícil quitárselo; el que nace hostelero no quiere dejar de serlo y vive por y para el cliente» — Rufino Calero
Posteriormente trabajó en la creación de la división hotelera del que era el primer touroperador español en aquel momento, OTA, llegando a dirigir 15 hoteles. En 1975, junto a Max Mazín y Antonio Briones, fundó la compañía Tryp Hoteles, consiguiendo tener 80 establecimientos hasta el año 2000, cuando la vendieron a Meliá Hotels International.
En el año 2001, junto a sus hijos, fundó la cadena Vincci Hoteles, que presidía hasta la actualidad. En 2015 fue reconocido por la medalla al Mérito Turístico en Sostenibilidad y Calidad, concedido a propuesta del Ministerio de Turismo.
“Su legado continúa en la figura de sus hijos, al frente ahora de Vincci Hoteles, quienes en conjunto, como ha sido siempre, hacen y harán prevalecer y crecer a la compañía como una cadena hotelera de referencia”, han afirmado desde la hotelera en un comunicado.