Globalia Meetings & Events recupera de forma paulatina la normalidad tras algunos cambios inevitables provocados por la COVID-19. El regreso es más especial en la delegación de Barcelona, que estrena casa. Las nuevas oficinas, ubicadas en la Avenida Josep Tarradellas 20, se alinean completamente con la filosofía y la imagen de marca de Globalia. La sede cuenta con espacios que fomentan y ponen en valor la creatividad en el diseño de eventos, seña de identidad diferencial de la agencia.
Para crecer en este nuevo contexto, Globalia Meetings & Events ha incorporado un equipo de DMC for MICE, la línea de negocio más estratégica de la compañía. De este modo se dará cobertura a cualquier necesidad de las empresas con sede fuera de España a la hora de organizar un evento o viaje de incentivo en nuestro país. Este servicio se presta de momento en los mercados europeos, pero el plan de expansión contempla atender también al suramericano.
Los clientes de la agencia en Barcelona se concentran fundamentalmente en los sectores Farma, Banca, Seguros, Belleza, Alimentación y Automoción. Globalia Meetings & Events colabora en la organización y planificación anual de eventos, dentro de la estrategia de marketing y comunicación de cada uno.
En palabras de Sonia Burillo, directora de cuentas MICE en la sede de Barcelona, “el principal desafío al que nos enfrentamos, no solo nosotros, sino todo el sector, será el de seguir evolucionando en este nuevo contexto provocado por la COVID-19. Hemos sido pioneros a la hora de ofrecer al mercado la posibilidad de llevar a cabo eventos online o de garantizar la seguridad sanitaria respetando los protocolos adheridos al sello COVID Safe, que también cubre las garantías jurídicas a cliente y proveedores”.
Las nuevas oficinas se abren en un marco de máxima seguridad y están adaptadas a la nueva normativa sanitaria vigente para volver a dar servicio desde la oficina: distancias de seguridad, horarios, uso de EPIs, mascarillas y geles hidroalcohólicos…
“Los últimos meses han sido complicados, pero han dejado un aprendizaje en lo profesional y en lo personal”, añade Burillo: “La importancia que tienen las relaciones humanas, la capacidad que tenemos para seguir avanzando y, sobre todo, lo importante que es pertenecer a una empresa con capacidad de reacción, flexible y que tiene como eje principal a sus clientes y empleados”.
