La restauración del distrito Centro, con una afluencia de visitantes similar a la que se produce en Navidad, y localidades turísticas como Alcalá de Henares, Chinchón, San Lorenzo del Escorial o Aranjuez han obtenido un incremento de facturación cercano al 10% en relación con la Semana Santa del año pasado
La Asociación Madrileña de Empresas de restauración, AMER, confirma los buenos resultados de esta Semana Santa en la Comunidad de Madrid para el sector de la gastronomía que han certificado sus expectativas previas.
En este sentido, se ha observado que se mantiene el crecimiento turístico de Madrid experimentado en los últimos años y que ya se han alcanzado, e incluso superado en según qué lugares, los niveles prepandemia en cuanto a visitantes y gasto en gastronomía.
Si bien es cierto que la mayoría de afluencia de público se concentra en el distrito Centro de la capital que ha tenido una ocupación turística sin precedentes en un periodo del año en el que históricamente Madrid se quedaba vacía, muchos pueblos y ciudades del resto de la Comunidad, que han tardado más en recuperarse que la capital, ya ofrecen datos positivos propios del período pre-COVID gracias al turismo de interior. Destaca, sobre todo, la enorme afluencia de visitantes que han acudido esta Semana Santa a localidades madrileñas como Alcalá de Henares, Chinchón, San Lorenzo de El Escorial, Morata de Tajuña, Villarejo de Salvanés, Aranjuez o Carabaña entre otras muchas.
Hay que tener en cuenta, sin embargo -advierten desde AMER-, que barrios de Madrid que no son turísticos y las ciudades residenciales del cinturón norte y sur no han podido suplir el enorme éxodo de sus vecinos que se han ido a otras localidades a pasar la Semana Santa con los pocos visitantes que han recibido, «si bien es cierto que han experimentado también cierto crecimiento respecto a años anteriores», señalan desde la asociación.
En definitiva, los primeros datos obtenidos por los restaurantes madrileños tras estos días festivos muestran claramente que se ha producido un incremento de la facturación cercano al 10% en muchas zonas de la capital y localidades turísticas, cifra superior a las previsiones de un 6,59% de incremento que adelantó AMER.