El pasado miércoles, 14 de septiembre, en la sala de prensa de l’Ajuntament de València, se dieron a conocer los puntos principales de la quinta edición del WPD, patrocinado por l’Ajuntament de València, Visit València, Delicious València, València Turisme, Turisme Comunitat Valenciana, l’Exquisit Mediterrani y Turespaña; y contando con colaboradores como la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia, Arrós de València Denominació d’Origen, Wikipaella y el Concurs Internacional de Paella Valenciana de Sueca.
El concejal de Turismo e internacionalización, Emiliano García, junto al secretario Autonómico de Turismo, Francesc Colomer; y el responsable de Turismo de la Diputación de Valencia, Jordi Mayor, han presentado la agenda de actividades a la que cualquier amante de este plato y el estilo de vida valenciano deberían prestar atención máxima.
Según Emiliano García, este evento trata de dar visibilidad internacional a nuestro plato más conocido, y se hará de diversas formas: los diez finalistas se concentrarán en la ciudad de Valencia y disfrutarán de diversas actividades antes de la gran final.
Chefs internacionales de diez países competirán por el trofeo (fabricado por el artista fallero José Luis Platero) en La Marina de Valencia, en la III Edición del World Paella Day Cup. Allí, mañana, 20 de septiembre, a partir de las 10:00, encontraremos show cookings, master classes de chefs participantes en las anteriores ediciones (entre los que encontraremos a la ganadora del WPD 2020, Chabe Soler, también presente en la rueda de prensa) o a Toni Montoliu (La Barraca de Toni Montoliu); y Rafa Margós, chef de Les Bairetes; también, se contará con la participación de la gran mayoría de mercados de la ciudad que, a su vez, competirán en el 1er Concurso de Paella de Mercados de la Comunidad Valenciana, a saber: el de El Cabanyal, Ruzafa, Mislata, Burjassot, Colón o el Central. El motivo de esta particular competición es mostrar la enorme importancia del mercado municipal como proveedor de los mejores ingredientes de km 0, fundamentales para una buena paella.
Por último, García informó de que el evento podrá seguirse a través de las redes sociales.
Mayor, en su intervención defendió que, a pesar de que todos sabemos que existe una receta concreta de la paella valenciana, podemos llamar «paella» a todo aquello que se cocine en paella, pero no solo eso: para ello debe añadírsele cariño y dedicación, contando con los productos del momento y que cada cocinero considere convenientes. Por supuesto, ya no es tanto lo que se decida añadir a una hipotética versión personalizada de una paella, sino a lo que rodea a ese plato: nos referimos a la familia, a los amigos, a compartir esa paella en una mesa porque, siendo sinceros, nadie jamás se ha cocinado este plato únicamente para sí mismo.
La paella es sinónimo de despreocupación, de desconexión. Podríamos decir, incluso, que se trata de un ritual de la demostración de afecto, cercanía y confianza. Quizás, incluso una suerte de excusa (deliciosa, eso sí) para pasar tiempo con las personas a las que se quiere de corazón. Todo ello habla de nuestra forma de ser valenciana, de nuestra cultura y nuestra forma de amar.
Chabe Soler tomó el relevo y agradeció al WPD la enorme labor que comete ya no solo los días en los que se lleva a cabo la celebración y las diversas actividades alrededor de una paella valenciana, sino al calado que ha tenido en la hostelería.
Según Soler, se ha notado un incremento del interés y el respeto por la paella y la cultura valenciana. Quizás ahora empiece a comprenderse que “no se puede hacer un arroz en veinte minutos, sino que lleva su tiempo y dedicación».
Por último, Francesc Colomer destacó la importancia del marketing y el posicionamiento permanente para poder presentar esta nueva convocatoria, especialmente durante y después de una pandemia.