Entrevista a Juan José García Ferrer, director general de Atención al Mayor y a la Dependencia de la Comunidad de Madrid.
«El programa de Rutas Culturales para Mayores de la Comunidad de Madrid es un gran ejemplo de colaboración público-privada»
¿Desde cuándo la Comunidad de Madrid viene ofreciendo estas Rutas Culturales para Mayores que el pasado año se ampliaron a mayores de 55 años?
Las Rutas Culturales para Mayores de la Comunidad de Madrid se vienen ofreciendo desde el año 2012. Durante los años 2020 y 2021 el programa estuvo suspendido como consecuencia del contexto covid y se reactivó en el año 2022 incorporando todo un catálogo de nuevas propuestas, como fue reducir la edad a los 55 años para poder acogerte al programa, añadir nuevas rutas, incorporar el concepto de rutas accesibles, rutas que son más cortas, pero que permiten que las personas con menos autonomía las puedan hacer de manera adecuada. Es decir, el año pasado empezamos a implementar una serie de medidas que hemos ampliado este año con otras adicionales.
¿Qué novedades presenta el programa este año? ¿Cuáles son esas nuevas propuestas?
En esta edición, que ofrece más de mil destinos, las empresas participantes, a través de sus programas de responsabilidad social corporativa, promueven el acceso a cuidadores de personas en situación de dependencia, de manera gratuita; para ellos se han destinado un total de 350 plazas gratuitas. Y la conserjería completará la oferta poniendo a disposición de estas personas las 145 plazas en residencias del “Programa Respiro” de estancias temporales, con el fin de que los mayores que estén a su cuidado queden atendidos durante su ausencia.
En la Comunidad de Madrid entendemos que hay que apoyar al cuidador no solamente con las prestaciones económicas, sino también con lo que llamamos “Programas Respiro”, para ello disponemos permanentemente de 145 plazas en residencias que ofrecemos a los cuidadores, tanto para convalecencias hospitalarias, como para estancias temporales de apoyo al cuidador, y queríamos trabajar junto con los operadores turísticos que forman parte del programa, vía sus programas de responsabilidad social corporativa, para dar acceso a los cuidadores, que tanto necesitan un “respiro”, a estos viajes. El gran problema del cuidador es que nunca piensa que es un buen momento para cuidarse a sí mismo y queremos facilitar que puedan hacerlo.
En todo caso ¿podrán acceder a estos viajes los cuidadores que no tengan los 55 años cumplidos?
Sí, en esto vamos a ser muy flexibles, porque el objetivo principal es el que es: el descanso del cuidador, si bien es cierto que el perfil medio del cuidador en la Comunidad de Madrid es muy cercano a esa edad.
¿Cuántas personas disfrutaron de este programa de Rutas Culturales para Mayores en 2022?
El pasado año disfrutaron de este programa casi cien mil personas. Es un número que nos ha llevado ya, prácticamente, a niveles de 2019. Por ello, este año hemos apostado por triplicar la oferta de plazas, el programa de este año ofrece más de 300.000, para que el ciudadano pueda elegir entre esta amplia oferta de viajes; además, aumentamos también los destinos. En Asia abrimos Vietnam, Filipinas y Malasia, y en África, Senegal y Kenia, como destinos calificados como seguros por el ministerio de Asuntos Exteriores y hemos comprobado que en el contexto del viaje esos destinos nos permiten hacer una oferta, porque para nosotros, además de los hoteles, la seguridad es muy importante.
Y otra gran diferencia respecto al programa del año pasado es que hemos incorporado determinados elementos a la oferta económica que nos permite que se puedan hacer viajes en temporada alta, algo que no era posible en ediciones anteriores del programa donde existía una política de costes máximos de los viajes. Pensamos que esto era un elemento limitador, porque muchas veces la persona que viaja a su vez es cuidador de un nieto, o tiene una serie de responsabilidades durante el año y creemos que las temporadas altas no pueden quedar al margen de la programación, con lo cual, en este sentido, también se ha hecho un esfuerzo muy grande, tanto por parte de las agencias de viajes como por parte de la Administración.
¿Qué presupuesto destina la Comunidad de Madrid para este programa?
Este es un marco de cooperación que es un gran ejemplo de cooperación público-privada, porque la Comunidad de Madrid lo que hace es que, mediante la coordinación de un programa tan amplio de plazas, lo que consigue es posibilitar unas condiciones muy atractivas para los mayores, para que puedan viajar. No es con cargo a los impuestos de los madrileños, no está dotado presupuestariamente y a lo que se compromete la Comunidad de Madrid en el marco del programa es a hacer el seguimiento y la evalución de las Rutas y, en este sentido, una de nuestras tareas es revisar una por una cada oferta, los destinos y la calidad y el servicio de los hoteles.
Toda la red de agencias de viajes que tenemos en la Comunidad de Madrid es la propia red de comercialización de este programa.
¿Tienen algún tipo de expectativa en cuanto al número de madrileños que van a acogerse a este programa en 2023? ¿Creen que 300.000 plazas serán suficientes?
El objetivo no es tanto que se llenen todas las plazas como que el ciudadano tenga un acceso garantizado al viaje que elija. Estos programas nacieron como programas de envejecimiento activo y saludable y a ese objetivo hemos incorporado la soledad no deseada y viajar es una buena manera de trabajar de manera preventiva ese elemento de la soledad. Y una cuestión esencial para comprender este programa, desde que la persona sale de viaje hasta que vuelve va acompañada de un guía desde Madrid, todos los grupos salen con una persona de referencia, que hace de guía y que se asegura de que vaya todo bien durante todo el camino.
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