- Este sábado 29 de abril, más de 400 personas ataviadas con indumentaria de finales del siglo XVIII recorrerán la ciudad, transformándola en un muestrario vivo de las tendencias de la época
- Videomapping de más de 1.628 m2, un campamento recreacionista napoleónico, teatro, música antigua, exposiciones y una ruta gastronómica, forman parte de la programación de la segunda edición de las Fiestas Goyescas de Zaragoza, entre el 28 de abril al 1 de mayo
Más de 500 personas, entre actores profesionales y ciudadanos, recorrerán el próximo sábado 29 de abril (desde las 19.00 horas) el centro de Zaragoza en un desfile que constituirá un viaje al siglo XVIII a través de la vestimenta. Se trata de una de las acciones enmarcadas en la segunda edición de las Fiestas Goyescas que celebra la capital aragonesa del 28 de abril al 1 de mayo.
El momento histórico que toma como punto de partida este pasacalles es el año 1790, cuando el pintor Francisco de Goya “era joven y, aunque ya vivía en Madrid, no era demasiado conocido”. “Es el homenaje que nunca se le hizo en vida”, sostiene Marian Pueo, directora artística del desfile callejero que transformará la ciudad en un muestrario vivo de la moda de hace tres siglos.
Las distintas clases sociales y los diversos estamentos de la sociedad pasearán por la ciudad, narrando a través de sus atuendos sus orígenes y posiciones. “Veremos a personas vestidas como los regidores del Ayuntamiento de la época, como miembros del clero o como integrantes de las clases altas o bajas”, apunta Pueo.
Mujeres ataviadas con trajes de corte imperio y elementos indispensables de la indumentaria goyesca, como la mantilla, representarán a las integrantes de los segmentos más adinerados de la sociedad, acompañadas por hombres con “traje de majo, el que más vinculamos con la moda goyesca, más conectado a la burguesía”, repasa la directora artística.
En este particular baile de máscaras, enmarcado en la celebración de unas Fiestas Goyescas que buscan reivindicar la conexión del pintor con Zaragoza, desempeñarán un papel especialmente relevante los accesorios. “En la época goyesca era muy popular el pelo rizado, por lo que veremos muchos postizos como en los cuadros de Goya. También podremos saber la clase social a la que pertenecían las mujeres por los sombreros, tocados, plumas, pañuelos o redecillas que lleven las mujeres. En general, veremos una representación de las tendencias de la época”, avanza Marian Pueo.
Si bien algunos de los diseños que se lucirán en el desfile presentan un poso de vestimenta histórica, otros han sido confeccionados por los propios ciudadanos en talleres organizados por Cámara de Comercio en colaboración con el Ayuntamiento de Zaragoza y en los que han contado con el asesoramiento de expertos en la indumentaria popular de la época, cuya influencia se extiende hasta la moda contemporánea. Así se encargó de recordarlo la exposición ‘Balenciaga y la pintura española’, que pudo verse en 2019 en el Museo Thyssen de Madrid y que repasaba la conexión del modisto de Getaria con maestros de la pintura española, entre ellos Goya. De él tomó Cristóbal Balenciaga no solo patrones y estéticas, sino el singular uso del color.
Exposiciones, rutas turísticas y gastronómicas
La segunda edición de las Fiestas Goyescas de Zaragoza, que tendrá la plaza del Pilar y sus alrededores como epicentro, completa su programa con un amplio abanico de actividades y propuestas culturales.
La plaza del Pilar abrirá sus cuatro días de programación el viernes 28 de abril con el Mercado Goyesco, con venta de productos con ambientación goyesca, y se instalará también un campamento recreacionista napoleónico.
Todas las noches, el protagonista seráel videomapping ‘Goya. El trazo maestro,’ un espectáculo audiovisual inmersivo de gran formato que convertirá la fachada del Ayuntamiento en un enorme lienzo de 1628 metros cuadrados, donde se plasmará el imaginario de Goya y algunos episodios de su vida.
Los amantes de la historia y obra del pintor podrán acudir a La Lonja para contemplar ‘Yo soy Goya. Zaragoza 1746-1775’, una novedosa exposición sobre Francisco de Goya comisariada por Domingo J. Buesa y que repasa la conexión del pintor con Zaragoza y Aragón.
Entre las actuaciones musicales previstas se incluye el espectáculo lírico escenificado “La Caramba” del conjunto musical Forma Antiqva, un referente internacional en la música antigua con 20 años de trayectoria. Esta producción de teatro musical se celebrará en el Palacio Museo Alma Mater, con doce músicos dirigidos por Aarón Zapico, en una propuesta escénica de Pablo Viar. También actuará el Cuarteto Quiroga, un grupo de cuerdas español de música clásica, fundado para recuperar la memoria del violinista gallego Manuel Quiroga, y que en la actualidad está formado por Aitor Hevia (primer violín), Cibrán Sierra (segundo violín), Helena Poggio (violoncelo) y Josep Puchades (viola).
Además, para conocer mejor a Goya y descubrir al mismo tiempo los encantos de Zaragoza como destino turístico, se llevarán a cabo dos visitas guiadas: el recorrido Paseo de Goya que seguirá las obras de Goya en Zaragoza (frescos, retratos y grabados nos acercarán a la personalidad del artista aragonés más universal), así como Goya, el origen del genio, centrada en los primeros años de la vida de Goya en Zaragoza y en cómo surgió el genio en el que se convertiría después.
La Asociación de Cafés y Bares de Zaragoza también se suma a la programación con la Ruta de la Tapa de Goya, una selección de establecimientos ubicados cerca de lugares en los que vivió el pintor o donde se puede visitar y disfrutar de su legado, con una tapa ambientada en la figura y época del artista aragonés. Así, nos acercaremos a las plazas Santa Cruz (Museo de Goya), del Pilar (Basílica), de la Seo (Alma Mater Museum, antiguo Museo Diocesano), de los Sitios (Museo de Zaragoza) y de San Miguel (en el número 4 se ubica la única casa donde vivió Francisco de Goya, entre 1768 y 1769, y que sigue en pie). Además, la Asociación Gastro Sitios organizará Gastrocaprichos de Goya, diferentes propuestas gastronómicas en forma de menús, platos, raciones y tapas inspiradas en el pintor.
Se trata de una iniciativa organizada por el Ayuntamiento de Zaragoza en colaboración con diversas entidades y dirigida a todos los públicos y edades.