El turismo del lujo en el Caribe tiene un claro referente, República Dominicana. Espléndidos resorts cinco estrellas, campos de golf de diseño, restaurantes de alta cocina, selectos hoteles boutique y centros comerciales con tiendas de diseñadores de renombre internacional hacen de República Dominicana un destino de lujo por el que apuestan los viajeros sibaritas.
“Desde hace algunos años el sector del lujo ha venido ganando fuerza como uno de los segmentos dinamizadores de la actividad turística en el país, apoyado en unas instalaciones de primera categoría y una propuesta experiencial que prima la autenticidad, la singularidad y la exclusividad”, comenta Karyna Font-Bernard, directora de la Oficina de Promoción Turística de República Dominicana en España y Portugal.
Por su parte, la Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes (Asonahores), en una estimación reciente, indicó que el turismo de lujo podría mover 195.27 billones de dólares americanos en 2021. La afluencia de este turismo de alto poder adquisitivo, con un importante efecto multiplicador sobre la economía local, está atrayendo asimismo a los inversores nacionales e internacionales y a los operadores especializados en el segmento premium.
Resorts y villas de lujo
El lujo tiene en República Dominicana un exponente cualificado, a la altura de las expectativas de los viajeros más exigentes. Los impresionantes resorts a pie de playa son una de las imágenes más características del destino. Mirando el mar Caribe o el océano Atlántico, enmarcados por esbeltas palmeras y cocoteros, estos espaciosos resorts diseñados con todas las comodidades se han ganado el reconocimiento del sector hotelero global. Son el lugar indicado para evadirse de cualquier género de preocupaciones y dedicarse, simplemente, a disfrutar de la exclusividad.
Operadores especializados en el mercado premium ofrecen suites y villas de ensueño, con piscinas de diseño que miran al mar y espacios para relajarse en un ambiente de total privacidad… porque la privacidad es un componente esencial de verdadero lujo, el que anhelan los viajeros premium.
Todo ello se puede encontrar en enclaves naturales extraordinarios y con propuestas de primera gama. En la costa atlántica de República Dominicana, donde la naturaleza se muestra más salvaje y exuberante, es factible alojarse en comunidades residenciales como Playa Grande Golf & Ocean Club, que ofrecen villas de lujo junto al océano.
Otro tanto puede decirse en la costa Este de lugares como Tortuga Bay, lujoso complejo perteneciente al Grupo Puntacana Resort & Club, único con categoría 5 Diamantes en el país. Sus elegantes villas, espaciosas y exquisitamente decoradas con materiales nobles, fueron diseñadas por el propio Óscar de la Renta. Por esta razón, Tortuga Bay también puede presumir de contar con la única boutique del afamado diseñador en el Caribe.
Mayordomo personal, cenas privadas con chef, exclusivas actividades holísticas, campos de golf o de polo… la oferta del lujo en República Dominicana realmente alcanza la excelencia.
Yates, marinas y shopping
República Dominicana posee una de las líneas costeras más extensas de las Antillas. Son más de 1.500 kilómetros jalonados de espectaculares marinas con capacidad para recibir yates de hasta 250 pies de eslora. La marina de Cap Cana es una de las más famosas, con restaurantes y bares exclusivos, boutiques de moda, teatro y salas de cine VIP. Otra marina de prestigio es la de Casa de Campo, que destaca por sus increíbles vistas a lo largo del río Chavón, en su desembocadura al mar Caribe, así como por su equipamiento de ocio, restauración y shopping.
Por supuesto, las compras son otra de las facetas clave en la industria de lujo. En un país vinculado estrechamente con la moda, donde se celebra la principal pasarela del Caribe cada mes de octubre, sería imposible no encontrar centros comerciales como Blue Mall y Ágora –en Santo Domingo-, con boutiques de diseñadores locales y de primeras firmas internacionales. La artesanía y el arte son otro de los productos con alta demanda, pudiendo adquirirse maravillosas obras en las galerías de la Ciudad Colonial, casco histórico de Santo Domingo.
Destino gourmet
En 2018 y 2019 la gastronomía se ha desvelado con fuerza como uno más de los atractivos turísticos de República Dominicana. La razón es que durante estos dos años, su capital, Santo Domingo viene ostentando el título de Capital de la Cultura Gastronómica del Caribe. El reconocimiento, otorgado por la Academia Iberoamericana de la Gastronomía, pone de manifiesto la riqueza culinaria dominicana, de sus productos locales y de su recetario más típico.
La alta cocina dominicana vive un momento dulce, no sólo por el nivel de sus chefs de mayor talento, sino por el reconocimiento y puesta en valor del mismo. A finales de mayo, la Academia Dominicana de Gastronomía, asociación que vela por la promoción de la gastronomía del país, anunció los nombres de los diez mejores restaurantes de Santo Domingo, ocupando la primera posición La Cassina. Sin duda, se constata una auténtica revolución gastronómica en República Dominicana, que despunta como destino top para el turismo gastronómico más selecto.
