









Murcia está de celebración. El año 2025 marca los 1.200 años del nacimiento de la ciudad de Murcia, fundada en el año 825 por el emir Abd al-Rahman II bajo el nombre de Madinat Mursiya. Doce siglos después, la capital del Segura rinde homenaje a su origen andalusí con un programa conmemorativo que une historia, cultura y gastronomía en una oferta turística renovada y de alta calidad.
El aniversario invita a recorrer una urbe que ha sabido conservar la huella de sus raíces árabes mientras se proyecta hacia el futuro. Pasear por su casco histórico es viajar del pasado al presente: desde la muralla árabe y los restos del arrabal de La Arrixaca hasta la monumental Catedral de Santa María, símbolo del esplendor barroco murciano.
Esta efeméride también ha permitido resaltar la rica herencia multicultural de la ciudad, con más de 700 eventos que celebran sus tres culturas —musulmana, judía y cristiana— y su evolución hasta convertirse en un destino turístico vibrante. Un claro ejemplo es el Centro de Interpretación Madina Mursiya que ofrece un recorrido inmersivo por la Murcia andalusí de los siglos IX al XIII. Este espacio museístico muestra restos arqueológicos de la muralla islámica, incluyendo lienzos del siglo XII, un cementerio (‘maqbara’) con unas 50 tumbas y estructuras de posibles panteones. Inaugurado en abril de 2024 tras ampliaciones recientes, el centro une hallazgos desde 1963, como la muralla expuesta inicialmente al aire libre. Recibe miles de visitantes, con visitas guiadas y eventos culturales que reviven puertas emblemáticas como la Puerta de las Siete Puertas, Puerta del Toro o Puerta del Sol.
En junio de 2025, se anunció la segunda fase, que expondrá la mítica Puerta de las Siete Puertas con tecnologías audiovisuales, reconstrucciones 3D y una línea temporal interactiva sobre 583 m². Financiada por fondos Next Generation busca potenciar el turismo en el 1.200 aniversario de la fundación de Murcia. El recorrido de 200 metros por viales de madera permite transitar por barbacana, antemuralla y saeteras, con énfasis didáctico accesible. Eventos como cenas históricas y visitas sensoriales enriquecen la comprensión de Madina Mursiya.
Siguiendo con la historia, cabe recordar que Alfonso X el Sabio, infante en 1243 y rey promotor de estudios superiores en Murcia, incorporó la ciudad a Castilla tras el Tratado de Alcaraz, fomentando su cultura árabe y fundando precursores de la universidad local. Su entrada triunfal en 1243 y donaciones como las casas a los dominicos en 1272 marcaron la transición pacífica. Jaime I consagró la mezquita mayor como iglesia en 1266, allanando el camino para la actual Catedral de Santa María, cuya construcción gótica-renacentista culminó en 1467.
Otros dos «compromisos ineludibles» para el viajero son la visita a la Catedral de Murcia, iniciada sobre la antigua mezquita aljama, que fusiona estilos gótico, renacentista y barroco, con bula papal en 1465 y el descubrimiento del Real Casino, edificio ecléctico del siglo XIX declarado Bien de Interés Cultural en 1983, que deslumbra con salones rococó, modernistas y el exclusivo Tocador de Señoras, abierto a visitas turísticas. La Catedral y el Real Casino de Murcia podrían ser dos hitos que resumen la historia de la ciudad: de la espiritualidad medieval al esplendor burgués del siglo XIX unidas como “puertas del tiempo” conectadas por la calle Trapería, que actúa como eje escénico donde el lector recorre siglos de historia en apenas unos pasos.
Gastronomía única y turismo de calidad
Pero Murcia no solo se celebra, se saborea. Su gastronomía única, marcada por los productos de la huerta y el Mediterráneo, se ha convertido en un emblema de identidad local y un potente atractivo turístico. Restaurantes con estrella Michelin, nuevas rutas de tapeo y experiencias gastronómicas inmersivas muestran la evolución de una cocina que fusiona tradición y creatividad. La gastronomía murciana inspira platos como el caldero del Mar Menor, zarangollo o pastel de carne, con productos frescos y arroz bomba que definen su cocina mediterránea. Los restaurantes de la ciudad reinventan recetas locales usando ingredientes regionales, También destaca por su uso de productos de la huerta, arroz DOP Calasparra, pescados del Mar Menor y vinos de Jumilla, fusionando influencias mediterráneas y tradicionales. Los paparajotes friten hojas de limonero en masa con azúcar y canela, un postre icónico. En Navidad destacan tortas de pascua con anís, cordiales de almendra y mazapán de Moratalla.
La Comunidad apuesta también por consolidar un modelo de turismo de calidad, sostenible y desestacionalizado, que pone en valor su patrimonio histórico y natural. Desde los paisajes del Valle de Ricote hasta las playas de Águilas o el Mar Menor, Murcia ofrece experiencias diversificadas que atraen tanto al visitante cultural como al amante del ecoturismo o el bienestar.
Con 1.200 años de historia viva, Murcia se reafirma como un destino imprescindible del mapa cultural y turístico español: una tierra donde el legado andalusí de Madinat Mursiya continúa inspirando el arte de recibir.

