La Federación Empresarial de Hostelería y Turismo de la provincia de Tarragona (FEHT), -la entidad que representa el 90% de las plazas de alojamiento de la provincia- ha presentado los principales indicadores turísticos del año 2021. Así, desde el 1 de enero y hasta el 15 de septiembre, según datos del Tourism Data System del Observatorio de Turismo del Departamento de Innovación Turística de Eurecat, las pernoctaciones en la provincia de Tarragona han disminuido un -43,9 % respecto al mismo periodo del año 2019. Respecto al año 2020 -considerado el peor año de la historia para el sector turístico de Tarragona- las pernoctaciones se han duplicado, aumentado un +106,4%. Con todo, la FEHT cifra que este año el sector turístico dejará de facturar unos 2.500 millones de euros respecto en 2019.
Así, en total, durante el 2021 se han llevado a cabo en la provincia de Tarragona más de 9,9 millones de pernoctaciones frente las más de 17,6 millones de 2019. En la Costa Dorada, el descenso -comparado con 2019- ha sido del -46,2%, mientras que en las Tierras del Ebro del -7,6%. Comparado con el mismo periodo de 2020, en la Costa Dorada, el crecimiento ha sido del +106,8%, mientras que en las Tierras del Ebro del +103,3%.
Berta Cabré, presidenta de la FEHT, ha anunciado que «es cierto que esta temporada 2021 hemos tenido una cierta recuperación de la actividad, básicamente sólo durante el mes de agosto, pero hay que recordar que veníamos de la nada. Todavía nos encontramos a la mitad de actividad turística de un año normal como fue en 2019. Así pues, no podemos estar satisfechos, ya teníamos claro que sería un año de impasse y de recuperación parcial, pero confiábamos llegar a un 65% de pernoctaciones de un año normal. Especialmente complicada es la situación para el turismo vacacional de costa y para los hoteles, que es donde realmente hay un peso muy significativo de la industria en nuestra provincia».
Respecto a los diferentes tipos de alojamiento Cabré ha informado que «la temporada se ha vivido de manera desigual entre hoteles, campings y apartamentos. Quiero recordar y remarcar especialmente que hay un 25% de la planta hotelera de la Costa Dorada que no ha abierto este año. Es muy duro saber que hay establecimientos cerrados desde octubre 2019, cuando terminaron aquella temporada, hace ya 2 años. Pero, lo más preocupante es que aún no sabemos cuándo podrán volver a abrir. Como mínimo, estarán dos años y medio cerrados».
Así, este año 2021 y respecto al 2019, los campings de la provincia de Tarragona han sufrido un descenso del -31,5%, los apartamentos del -41,7% y los hoteles del -54,8%. Al respecto, Cabré ha querido recordar que «a inicios de año también estuvimos cerrados y ha habido muchas dificultades de movilidad para toda la población. Esto ha afectado a toda la tipología de establecimientos, tanto de costa como de interior.
Pero, está claro que los visitantes han preferido alojarse en establecimientos donde hay más posibilidad de hacer vida al aire libre que aquellos que son de entornos más cerrados. Además, los hoteles han notado la falta de la touroperación que, este año, tampoco ha trabajado debido a las dificultades y restricciones en la movilidad. La touroperación es clave en la Costa Dorada, aporta mucho tráfico aéreo en el aeropuerto de Reus y también a nuestros alojamientos. Necesitamos que en 2022 vuelva a operar con normalidad».
El mercado nacional ha aguantado. El internacional sigue limitado
Este año 2021, el mercado nacional ha aguantado con datos similares al 2019, así las pernoctaciones durante todo el año han disminuido un -14,9% respecto al 2019. Cabré ha recordado que «un año sin Covid tenemos el 50% de turismo nacional y el 50% de internacional, este año sólo hemos tenido el 22,3% de extranjeros». Así, por mercados internacionales, comparados con el 2019, el francés ha descendido un -51,8%, el británico un -95,7%, el ruso un -99,1%, el holandés un -53,7%, el alemán un -71,6%, el irlandés un -90,8% y el belga un -58%.
Ahora mismo, en la provincia de Tarragona, el turismo vacacional ya se da por terminado y es que Cabré ha señalado que «no hay suficientes visitantes internacionales y los establecimientos se ven obligados a cerrar antes de tiempo. Habitualmente el turismo nacional, por esta época, sólo viaja en fines de semana y puentes. Sólo los campings, donde se alojan viajeros seniors de centro Europa tendrán una mínima actividad».
Medidas para la supervivencia del sector
Ante esta temporada al 50%, la FEHT alerta de la llegada de una temporada de otoño e invierno «muy dura para el sector turístico» y reclama a las administraciones una mayor planificación a la hora de establecer medidas que ayuden el sector. Cabré manifiesta que «siempre lo deciden todo en el último minuto y las empresas no nos podemos planificar, ni organizar». Estas manifestaciones las hace en referencia a la última prórroga de los ERTE aprobada por el Gobierno Central a sólo tres días de finalizar el período y también en referencia al programa IMSERSO. «No puede ser que no sepamos todavía las condiciones de los nuevos ERTE que entran en vigor pronto y tampoco sepamos si, finalmente, habrá IMSERSO y si las hay en qué condiciones será. De un día para otro no podemos decidir abrir o cerrar establecimientos, nuestros trabajadores también se merecen poderse planificar y saber si tienen que trabajar o no «, concluye Cabré. Además, también ha reclamado a la Generalitat de Cataluña una nueva moratoria al incremento de un 30% en el Impuesto sobre las estancias en establecimientos turísticos previsto para el próximo 1 de octubre.
Cabré ha manifestado que «el mes de agosto ha sido esperanzador y ha dado un poco de oxígeno a trabajadores y empresarios». Sin embargo, «después de este espejismo», la FEHT advierte que se acerca una temporada «muy incierta y en la que muchos establecimientos han vuelto a cerrar por falta de turistas». Ante este panorama, la FEHT insiste en que «es más necesario que nunca que se proteja a los trabajadores y los empresarios para evitar la destrucción de miles de puestos de trabajo y de empresas».
Cabré ha concluido recordando que «el turismo es el principal motor socioeconómico de la provincia de Tarragona. Generamos un PIB específico turístico y un impacto del 25,70% respecto al total. Además, un 28,5% de los cotizantes a la Seguridad Social corresponden al sector del turismo y la hostelería. Así pues, necesitamos medidas que nos ayuden a afrontar lo que queda de 2021 y hasta que volvamos a recibir visitantes el 2022 con unas mínimas garantías. hay mucha gente que depende del turismo, tanto directamente como indirectamente».