La negativa a abonar estas cantidades supone una vulneración de los derechos de los pasajeros
La Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV) considera inaceptable que algunas aerolíneas no hayan devuelto el dinero que adeudan a las agencias de viajes correspondientes de los reembolsos.
En octubre de 2020, CEAV cuantificó en 325 millones de euros los reembolsos pendientes de sus proveedores, de los que unos 250 millones de euros correspondían a las compañías aéreas. Si bien es cierto que numerosas de estas empresas han procedido a gestionar sus reembolsos, algunas compañías como Ryanair, Norwegian, Plus Ultra o Air Europa, entre otras, continúan sin hacerlo en su totalidad, cuando además algunas han recibido fondos de la SEPI.
La negativa a abonar las cantidades debidas a los pasajeros dentro del plazo que recoge la normativa supone una vulneración de los derechos de los pasajeros aéreos desde el inicio de la pandemia y un claro incumplimiento de la normativa comunitaria, concretamente del Reglamento (CE) nº 261/2004, que establece la obligación de reembolsar en el plazo de siete días en caso de cancelación de los vuelos.
Resulta flagrante el caso de Air Europa, que, a pesar de haber recibido 475 millones de euros de SEPI (es decir, de los contribuyentes), va devolviendo a cuentagotas el importe de los billetes cancelados. Desde CEAV se ha reiterado en numerosas ocasiones la necesidad de vincular directamente la ayuda estatal a las aerolíneas al cumplimiento de sus obligaciones con los pasajeros, como así lo recomienda a demás el Informe Especial 15/2021: Los derechos de los pasajeros aéreos durante la pandemia de COVID-19, publicado por el Tribunal de Cuentas Europeo.
Para Mercedes Tejero, gerente de CEAV, “las agencias nos hemos visto han visto en la obligación de adelantar los reembolsos correspondientes a los vuelos incluidos en los paquetes contratados con las aerolíneas, con el consiguiente perjuicio. Esto agrava la ya de por sí complicada situación de las agencias de viajes que, después de meses de parón, empiezan poco a poco a tener algo de actividad, pero ni mucho menos que a los niveles de otros subsectores turísticos”.