Cada año, miles de peregrinos y amantes del senderismo recorren el Camino de Santiago, siguiendo las numerosas rutas hasta Santiago de Compostela, donde se encuentran los restos del Apóstol Santiago. En 2023, sin ir más lejos, llegaron a la capital gallega más de 445.000 caminantes, según las estadísticas publicadas por la Oficina de Acogida al Peregrino de la Catedral de Santiago de Compostela. Ya sea que estés buscando un viaje espiritual, un desafío físico o una experiencia cultural, aquí tienes algunos consejos para disfrutar al máximo esta ruta milenaria.
Elige la ruta adecuada para ti
La mayoría de la gente opta por recorrer el Camino Francés, que se extiende desde la ciudad de Saint-Jean-Pied-de-Port, a los pies de los Pirineos franceses, hasta la capital gallega, en el noroeste de España. Es la ruta más concurrida, algo a tener en cuenta si lo que se busca es encontrarse con muchos peregrinos y amantes del senderismo. Sin embargo, el paisaje se vuelve un poco monótono, sobre todo en los meses de verano, cuando todo está seco.
El Camino del Norte es otra ruta clásica del Camino de Santiago que tarda varias semanas en completarse, desde Irún, en la frontera entre Francia y España, en el País Vasco. Está considerada la ruta más pintoresca, ya que el paisaje varía desde espectaculares senderos costeros que ofrecen impresionantes vistas del mar cantábrico, hasta senderos de montaña y bonitos pueblos diseminados a lo largo de la ruta. No es necesario recorrer los 820 kilómetros de Irún. Puedes elegir un punto de partida más cercano a Santiago de Compostela, ya sea San Sebastián o Bilbao. La flexibilidad del Camino permite a los peregrinos y amantes del senderismo iniciar su viaje desde cualquier punto de la ruta.
Elige la época adecuada para hacer el Camino
El Camino de Santiago es transitable todo el año, como señalan las agencias de viajes. Sin embargo, la primavera (abril y mayo) y el otoño (septiembre y octubre) son las mejores épocas para recorrerlo, ya que presentan un clima mucho más agradable y mucho menos tráfico peatonal. Por otro lado, si no te importa el calor y quieres disfrutar de un ambiente más animado, el verano puede ser la opción ideal. Pero ten en cuenta que durante esta época habrá una gran afluencia de peregrinos y amantes del senderismo y es posible que algunos albergues no tengan camas disponibles. Evita el invierno porque suele presentar condiciones climáticas adversas y algunos albergues pueden estar cerrados debido a la baja afluencia.
Lleva el calzado adecuado
El calzado es, sin duda, la pieza más importante del equipo para tu viaje por el Camino de Santiago, y también la más personal. Los pies de cada persona son diferentes, y esas diferencias se hacen aún más evidentes a lo largo de varios cientos de kilómetros caminando por terrenos irregulares. Evalúa tus propias necesidades, ya sea la sujeción del arco plantar, la transpirabilidad, el peso o cualquier otro factor, y ten en cuenta la época del año en la que vas a hacer el viaje. Asegúrese de llevar botas de montaña o zapatillas de trekking cómodas que hayas usado previamente. Esto es muy importante para evitar ampollas. Además, lleva contigo calcetines de calidad que absorban la humedad y eviten la fricción.